En condiciones normales, los mercados se van moviendo “alrededor” de una media y cuando el movimiento se produce fuera de dicha media es debido a sucesos o eventos que no suelen ser habituales.
Y es una realidad que hoy en día estamos sujetos a muchas variables y condicionantes que pueden producir esa alteración, tales como:
– Cambios en las políticas monetarias de los Bancos Centrales.
– Datos macroeconómicos que no se esperaban.
– Malas previsiones o resultados de las compañías cotizadas (aquí entrarían los profit warnings).
– Resultados electorales y cambios de Gobiernos.
Todas estas razones y otras son responsables de cambios en el devenir de los movimientos de los mercados y por tanto incrementar sustancialmente la volatilidad de los mismos.
Pero hubo un matemático, Benoit Mandelbrot que decía que los movimientos de los mercados que se salían de la media con cierta intensidad eran más habituales de lo que se creía y no estaba muy de acuerdo con todo lo que se comentaba al respecto.
Pero un cisne negro es otra cosa.
¿Qué quieres saber?
Qué es un cisne negro en economía
Se podría definir el fenómeno cisne negro en economía como un suceso o hecho que es imprevisible, en el sentido de que no se podía esperar que ocurriese y que básicamente es muy complicado de poder prever. Pero esto no significa que no pudiera hacer acto de presencia, no es algo que se pudiera catalogar de imposible o increíble, simplemente que las probabilidades de que pasase son remotas, pero posibles.
Así pues, sus dos rasgos son:
- Es un acontecimiento impredecible y que no se esperaba.
- Tiene relevancia y por consiguiente efectos importantes en los mercados financieros..
Una vez que se ha producido se puede explicar de manera fundada el por qué ha sucedido.
Como ejemplos podríamos enumerar:
- Los atentados del 11 de septiembre del 2021 en Estados Unidos a las Torres Gemelas y el Pentágono. Todo el mundo sabe que un atentado terrorista de gran magnitud siempre es posible y viable, pero nadie esperaba que sucediese, es más, era altamente improbable y las consecuencias económicas y para los mercados financieros fueron notables.
- La crisis económica del 2008. Todo inversor es plenamente consciente de que cada x años surge una crisis financiera, pero nadie preveía una de tal intensidad a nivel global con efectos devastadores.
- Sucesos naturales. Erupciones de volcanes, maremotos, tsunamis, terremotos, son hechos poco frecuentes pero que ocurren.
- Incluso la pandemia del coronavirus también se podría catalogar como un cisne negro, no era descabellado pensar que algún día pudiera surgir un virus letal y muy contagioso.
- Y podríamos seguir con la lista: la Primera Guerra Mundial, la llega de Hitler al poder, las crisis de 1929 y 1987, el Brexit.
El ser humano siempre ha querido anticiparse a los cisnes negros, el problema es que todos los métodos implementados se basaban en lo vivido en el pasado para poder predecir el futuro, hecho por el cual, a día de hoy, no han gozado de mucho éxito.
Qué es la teoría del Cisne negro
El economista Nicholas Taleb esgrimió su teoría del cisne negro en el año 2.007, argumentando que estamos siempre rodeados y sujetos a sucesos extraños, que no se pueden prever, que son muy improbables que sucedan y que tienen consecuencias muy relevantes para el mundo.
Pensaba que el ser humano tiende siempre a elaborar historias muy simples y sencillas acerca de sucesos que son muy complejos, con lo que finalmente se tiende a cambiar lo que es la propia realidad de las cosas y perdemos la perspectiva de dicha realidad, con lo que nos volvemos sin capacidad alguna de poder predecir o aventurar toda anomalía estadística.
Es decir, Taleb cuestiona los análisis económicos que se hacen para predecir el futuro mediante una extrapolación de lo que ha sucedido en el pasado, predicciones que, tarde o temprano, se ven confrontadas por la aparición imprevista de un cisne negro.
Así pues, la teoría del cisne negro, en el ámbito económico, describe aquellos sucesos que suceden por sorpresa y que nadie había previsto ni tenido en cuenta porque, en principio, eran improbables y remotos y que terminan teniendo un gran impacto y repercusiones trascendentales.
Qué es el indicador Black Skew

El indicador Black Skew o indicador Cisne Negro es publicado por CBOE y se calcula utilizando las opciones del índice S&P 500 y es considerado como un indicador del sentimiento de los inversores.
Lo que hace este indicador es medir el “riesgo de cola” en el S&P500, es decir, el riesgo a que el S&P500 se gire y caiga con fuerza debido a un suceso.
El indicador Skew se mueve entre los 100 y los 150 puntos y cuanto mayor es su valor implica que el mercado prevé un riesgo importante. Si está en 100 puntos significa que la percepción del riesgo por parte de los inversores es la normal, la habitual. Pero a medida que sube nos está indicando que los participantes del mercado ven más probable que suceda algo relevante y negativo para el S&P500, aunque no quiere decir que finalmente se vaya a producir.
Si el indicador se encuentra en su parte alta, es decir, entre 145 y 150 puntos estaría indicando que los inversores institucionales están comprando opciones put (out of the money) de cara a cubrir sus carteras ante un “previsible movimiento bajista del mercado.
Si hablamos ya de ver el indicador en torno a los 150 puntos o incluso más, tendríamos que las posibilidades de que el S&P500 caiga más de un 5% y que pueda incluso desplomarse un 10% son elevadas, eso sí, caídas no justo en ese momento, sino en el corto plazo.
Su rango de movimiento suele ser entre 100 y 120 puntos y cabe destacar que desde el punto de vista histórico el S&P500 cayó 3 meses después de que el indicador subiera a cotas elevadas.
No hay que tomar el indicador Skew como un dogma de fe de cara a poder predecir caídas importantes del mercado, de hecho la comunidad inversora no le suele prestar demasiada atención, entre otras razones porque se pueden observar periodos en los que la volatilidad del mercado era bastante baja y en cambio el indicador marcaba niveles elevados entre 128-1320 puntos.
Cómo protegerse un inversor ante los cisnes negros
Partimos de la base de que es muy difícil tener una protección total, más que nada porque ya hemos visto que una de las características de este tipo de fenómenos es su imprevisibilidad.
Pero ello no es óbice para actuar de manera preventiva, por lo que siempre es importante invertir dinero con cabeza y contar con una cartera bien diversificada en diferentes mercados, países y sectores.
Ahora ya sabes qué es un cisne negro y cómo afecta a la economía.